lunes, 7 de febrero de 2011

Modelos de gestión de la convivencia

El texto de Juan Carlos Torrego nos expone los diferentes modelos que existen para la resolución de posibles conflictos ocasionados en el aula, así como las consecuencias que cada uno de estos modelos puede ocasionar en los alumnos envueltos en el conflicto.

El modelo punitivo consiste en establecer una sanción ante una acción considerada como mala (una falta) y nombrada como tal en las normas de convivencia del centro.
Lo que supondría un castigo inmediato. No se produce una relación ni se resuelve el conflicto.

Por ejemplo: María la profesora paró la clase por Javier el alumno agresor, centrando su atención en él, le manda a la jefatura debido a su mal comportamiento y su reiterada forma de interrumpir en la clase. Una vez que ha llegado a la jefatura le ponen un castigo, un parte explicándole que están hartos de su mal comportamiento y que no va a poder regresar más al colegio.

Esto nos hace ver que el modelo está basado en un carácter preventivo y que los alumnos sancionados no mejoran la conducta ni tienen un matiz recuperador, es más puede producirse una pérdida de atención y realización de las tareas escolares y una reiteración de sus malas acciones, su mala conducta.

El modelo relacional se centra en una resolución del conflicto a través de la relación directa de las partes involucradas en el mismo. Consiste en la búsqueda de una solución por medio del diálogo, el niño recibe una sustitución moral y por lo tanto libera su culpa, a través de la búsqueda de soluciones de las mismas personas que están implicadas en el suceso y de las del centro, para que así se reconcilien uno con otro.
El modelo relacional e intensivo resuelven el conflicto a través de la relación y el diálogo, siendo siempre privado.
Las ventajas que encuentro de este modelo, el relacional, es la reparación del daño entre el agresor y la víctima, ya que se abarcan distintas medidas y causas para la resolución del problema.

A mi parecer el más apropiado para la edad escolar, ya que además conocerse ambos y asumir la culpa utilizando el diálogo de manera autónoma, y esperando que sea responsable. Pero todo no son ventajas, ya que no siempre los profesores no disponen del tiempo suficiente para iniciarles a los alumnos a este modelo, y ni que los alumnos quieran poner de su parte y no lleguen a poder ser conscientes de sus propios errores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario